¿A qué se debe el éxito mediático de Javier Hernández?

*La siguiente es una publicación dedicada a Manuel Enciso, quien se pregunta si Hugo Sánchez o Luis García, en sus respectivos "momentos futbolísticos" por Europa y con la tecnología y las redes sociales de hoy -de la mano de la mercadotecnia-, hubieran provocado el mismo impacto mediático y la misma cantidad de información (fama) como hoy en día ocurre con los buenos resultados que ha dado el `Chicharito´ en el fútbol inglés, permeando a nivel mundial.

El fútbol como un deporte global
El fútbol es, por naturaleza, un deporte global -debido a que puede practicarse sobre cualquier superficie, no es característico de un país o de alguna clase social en particular, se encuentra directamente relacionado a beneficios sociales y, por lo tanto, a beneficios políticos, y no tiene fronteras. No sin explicación, la FIFA cuenta con un mayor número de países agremiados que la misma ONU-.

Tomando en cuenta dicha globalización, es necesario tomar en cuenta tres nuevos factores que participan en la respuesta al éxito mediático de Javier Hernández.

Situación económica, política, religiosa y social en México y el resto del mundo
Vivimos en un mundo en constante transformación gracias -en gran medida pero también entre otras razones- a los avances tecnológicos de los que hablaremos más adelante.

Así pues, el mundo ha comenzado a entrar, no en una transición hacia una nueva civilización, sino a a una nueva era en donde los cambios del día a día y de gran magnitud, serán la gran constante con la que habremos de vivir y convivir.

Estos cambios nos han traído desordenes -han sido cambios drásticos, por llamarle de otro modo- en distintos ámbitos que por muchos años permanecieron en una especie de "estatus quo". Ahora, por hablar específicamente de México, podríamos decir que la situación económica nos golpea muy fuerte -no estamos preparados para la nueva era que mencionamos anteriormente-, que en el ámbito de la política se ha generado un descontento generalizado entre la población, entre otras cosas, por el ambiente de violencia que se vive alrededor del país, que la religión -cualquiera que esta sea- ha venido perdiendo fuerza en los últimos años y que los mexicanos nos hemos visto seriamente afectados en términos sociales por las dificultades que representa el trabajar para sobreponerse, sobre todo, de los dos primeros ejemplos.

Tecnología y redes sociales
Las tecnologías de información y las distintas redes sociales son, hoy por hoy, las herramientas que permiten manifestaciones masivas sin precedentes -véase el caso de los países árabes y del norte de África-, partiendo siempre de expresiones que dan cabida a la libertad de expresión y a la lucha de egos -entre otras cosas-, pero lo más importante, a la manifestación, siempre natural, de cualquier individuo que  encuentra en dichas herramientas la plataforma ideal para liberar sus temores, represiones, anhelos, tristezas, alegrías y toda clase de sentimientos que no podía dar a conocer al mundo un par de años atrás.

Una vez más hablamos de globalización.

El papel de la Liga Premier de Inglaterra y del Manchester United
El club de Manchester y la liga en la que participa son, por política y filosofía, organizaciones que entienden la globalización como el principal beneficio para generar utilidades económicas -o tal vez menores pérdidas económicas-. No "en balde", la liga Premier y el Manchester Utd. están catalogadas como dos de las organizaciones ligadas al deporte que mejor utilizan las redes sociales y las tecnologías de información para acercarse al consumidor.

Entendiendo esto, la Liga Premier de Inglaterra y los "Red Devils" emprendieron una estrategia de mercadotecnia e imagen que ha beneficiado a Javier Hernández en muchos sentidos.

En principio, la liga y el club ingleses acordaron, como sucede en todos los casos de transferencia de jugadores extranjeros a la primera división de ese país -también sucede en la MLS de los Estados Unidos, no así en México- el traspaso del jugador porque entendieron el beneficio económico y el impacto social que éste podía representar para su fútbol.

Acto seguido, ambas organizaciones llegaron a la conclusión de que el hecho de permitirle a Hernández portar en el dorsal la palabra `Chicharito´ -normalmente eso no está permitido en la Liga Premier- sería también un beneficio en cuanto a facilitarle al consumidor inglés el reconocimiento de marca y el top of mind que una marca común y corriente busca para ser vendida en mayor volumen.

Esto, de la mano de la buena comercialización de la imagen de Javier Hernández -ha dado resultados deportivos, pero recordemos que la playera con su nombre y número se vendió "como pan caliente" mucho antes de que Javier Hernández debutara en un partido oficial con el equipo rojo-, permitió también que los derechos de transmisión de los partidos de Manchester United en América Latina se revaluaran -ayer pudimos ver inclusive la transmisión por Televisa-, que la activación de la marca Manchester United tuviera un éxito rotundo durante la visita del equipo inglés a Guadalajara y Estados Unidos y que ese mismo equipo se hiciera de una inmensa base de clientes, sobre todo, en México y en muestro vecino país del norte.

Conclusión
El mundo necesita expresarse y ser escuchado. Vivimos en una era en la que eso está permitido y al alcance de muchos miles de millones de habitantes, pero vivimos también en una realidad que parece oscura, difícil de sobrepasar. Y aquí es donde los "héroes" con los que mejor nos identificamos vienen a darnos un respiro y el mensaje tan trillado de ¡Sí se puede señores!

Es cierto, Luis García y Hugo Sánchez también tuvieron un buen paso por Europa mientras la situación en México era igualmente oscura. Pero mi respuesta es NO, vivimos en una era en la que no podemos comparar el éxito mediático de Luis o de Hugo con el de Javier, ni transportar sus "momentos futbolísticos" al año 2011.

Son el Manchester Utd. y la Liga Premier de Inglaterra de hoy, las redes sociales de hoy y, por último, el gran carisma de un muchacho que ha dejado atrás el fantasma del "Ya merito", de los anteriormente famosos Ratones Verdes y de la mediocridad, los que han logrado esto.

Les mando a todos un abrazo con fuerza o, en otras palabras, ¡muy `Chicharizado´!