Guadalajara, una oportunidad en el deporte

La decimosexta edición de los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011, sin lugar a dudas, ha dejado en la ciudad más poblada del occidente del país un legado que deberá ser aprovechado (por la sociedad) para beneficio de la sociedad.

Y es que el reto ahora se concentra, además de en concluir con éxito la justa continental en cuanto a su organización y en mantener la respuesta positiva del público, en saber administrar y dar uso a las instalaciones deportivas que ahora lucen de primer nivel. Esto, sumado a la intención del público por involucrarse en el ámbito deportivo y cultural, debe ser razón más que suficiente para que se logre, no solamente incrementar el número de deportistas de alto rendimiento y ganadores de medallas en competencias internacionales de esta localidad, sino para llevar al más alto escalón el aprovechamiento de las instalaciones con que contamos hoy en día.

Por si fuera poco, la organización de este evento internacional ha dejado en manos de nosotros los tapatíos un conocimiento y una experiencia que eran difíciles de obtener bajo las condiciones en que normalmente vivimos en esta ciudad: conformismo, falta de profesionalismo, rezago económico y bajo nivel educativo, entre otros. Con esto pues, estoy convencido de que organizarnos y trabajar de manera profesional ya no serán conceptos ajenos a quienes hemos tenido la oportunidad de colaborar en este evento y podríamos tener en nuestras manos el futuro de la administración de la infraestructura que hoy está para presumirse.

Imaginemos las instalaciones con una alta demanda de niños y adultos, estudiantes y chavos de comunidades marginadas o incluso reos en busca de distracción, hombres y mujeres, rockeros y... También imaginemos las sedes deportivas como foros de espectáculos y conciertos, exposiciones culturales y artísticas, competencias locales, regionales e internacionales...

Hoy debemos enfocarnos en lo que viene; Guadalajara deja de ser una ciudad de fútbol para convertirse en la capital mexicana del deporte y en una fuente cultural my atractiva. ¿Quién le entra?